Maduro pide cambios en Mercosur para ampliarlo al resto de Latinoamérica:
En Uruguay,
primera etapa de su viaje para recabar apoyos en el cono sur, el presidente
venezolano ratifica con Mujica el acuerdo petrolero
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, comenzó
este martes en Montevideo una gira por los países miembros de Mercosur para
recabar apoyos políticos en ese bloque que desde el año pasado integra su país. Después de su
ajustada victoria electoral del 14 de abril pasado, en unos comicios
cuestionados por la oposición, Maduro también busca ratificar la petrodiplomacia de su
antecesor, Hugo Chávez, que consiste en vender petróleo con bajo coste
financiero a países latinoamericanos a cambio de comprarles alimentos y otros
productos que escasean en Venezuela.
Tras encontrarse con su homólogo uruguayo, José
Mujica, Maduró anunció en rueda de prensa acuerdos para ratificar el
abastecimiento de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) a su homóloga
uruguaya ANCAP, aunque lo más novedoso consistirá en “profundizar la alianza
alimentaria”. Pero el presidente venezolano también pidió cambios en Mercosur:
“Tiene que cambiar para convertirse en un poderoso imán de la unión de
latinoamericana”. Venezuela asumirá por primera vez la presidencia de Mercosur
en la segunda mitad de 2013.
En la misma conferencia, Mujica llamó a “respetar y
tolerar las diferencias” que hay entre los países de la región. “Para eso hay
que tolerar, comprender, hacer viable caminos que parecen imposibles, la diversidad
debe ser respetada en América Latina. No cometamos el error de volver atrás
cuando hemos dado un salto de esta naturaleza”, se refirió a la Unión de
Naciones Suramericanas (UNASUR), que reúne a los cinco socios de Mercosur
(Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Venezuela), a dos que aspiran a sumarse
(Ecuador y Bolivia), tres de la Alianza del Pacífico (Colombia, Perú y Chile),
Guyana y Surinam.
Maduro, que sigue peleando con la oposición por el
recuento de los votos y que ha mantenido también polémicas con el Gobierno de
Perú y el expresidente colombiano Álvaro Uribe, hizo su primer
viaje al exterior a Cuba. El nuevo jefe de Estado visitará este miércoles
Buenos Aires y el jueves, Brasilia. El periplo excluye a Paraguay, país
suspendido de Mercosur hasta agosto próximo, cuando asuma el poder el ganador de las recientes elecciones,
Horacio Cartes, y se solucione la crisis institucional que produjo la polémica destitución de Fernando Lugo como presidente en
2012.
Este martes, al aterrizar en Montevideo, el
mandatario venezolano explicó su segunda salida al extranjero: “Venimos a
ratificar el camino de unión con Uruguay, con Mercosur, de construcción de un
mapa estratégico integral en lo comercial, en lo industrial, lo agrícola, lo
energético, en lo cultural, en lo humano, de unión profunda de nuestros
pueblos”. Uruguay importa todo el petróleo que consume y el año pasado le
compró crudo a Venezuela por 950 millones de dólares, con una financiación a 17
años y un tipo de interés del 2% anual. Junto a Maduro viajaron directivos de
PDVSA, que tenían previstas reuniones también en Argentina, un país devenido
importador neto de energía en los últimos años. Uruguay exportó el año pasado a
Venezuela por 400 millones de dólares, un 24,7% más que en 2011, sobre todo
lácteos, pollo y arroz. “Parte de la gira que arranco es para garantizar, para
fortalecer nuevamente la reserva alimentaria de productos básicos de nuestro
país a tres meses”, explicó Maduro. Además ambos países iban a firmar acuerdos
para intercambio de coches, que ambos países ensamblan, y construcción de
viviendas sociales, materia en la que se había especializado el Gobierno de
Chávez.
Antes de la reunión con Maduro, Mujica le formuló
algunas recomendaciones en una entrevista con la televisión estatal venezolana
VTV: “Quienes están al mando del Gobierno debieran darle un valor secundario a
la polémica pública y un valor fenomenal a la gestión y el trabajo concreto. Si
no, entran en el juego que se le quiere plantar de estar distraído,
permanentemente discutiendo y creo que, después de pasar una instancia como la
que tuvieron, la cosa más importante es gobernar y enfrentar los problemas más
duros que tiene la gente para tratar de solucionarlo. Y [hacer] alguna
declaración de vez en cuando pero no dar por el pito lo que no vale el pito”.
Maduro valoró la opinión de Mujica: “Es nuestro gran consejero”. El presidente
venezolano, que en la campaña electoral había sugerido que Capriles era gay,
llegó a Uruguay un día después de que su par anfitrión promulgara la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo.
La oposición conservadora uruguaya cuestionó la
visita de Maduro. “No podemos ser ajenos a las actitudes que se alejan de los
valores democráticos, actitudes que hoy en día sufre Venezuela”, dijo la
diputada Verónica Alonso, del Partido Blanco, que cuestionó las agresiones a
parlamentarios de la oposición venezolana. Pedro Bordaberry, senador del
Partido Colorado e hijo del exdictador uruguayo, criticó que Maduro solo se
reuniera con Mujica y su izquierdista Frente Amplio, y no con el Parlamento o
la Suprema Corte.
El PAIS; 8 de mayo de 2013 por Alejandro
Rebossio (Buenos Aires)
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